viernes, 16 de octubre de 2009

Un Nuevo Comienzo (Borrón y cuenta nueva)



Por esa mujer desempolvaría el corazón
Me despediría de la soledad
Y humedecería de nuevo los labios.

Sonreiría de nuevo sin razón
Miraría otra vez los astros
Y los compararía con mi amor.


Estrangularía mis miedos
Y sacaría del archivo mis anhelos.

Volvería a ser más humano
Y menos ingeniero
Más poesía
Y menos ecuación.

Sería más agua que fluye
Y menos arena que espera.

Por ella desataría los nudos
De mi garganta para poder
Decirle te amo
Desencadenaría mis manos
Para abrazarla
Y mis pies
Para perseguirla.

Volvería a ser niño
Por la inocencia
Y viejo
Por la conciencia.

Todo
Absolutamente todo
Lo haría por ella.

Si tan solo supiera
Cual de todas
Las que veo
Es su huella.

Para encontrar
A aquella
Quien será
Mi nueva estrella.

A ella que ya se tardó en llegar, en tono de invocación y exigencia. Aparécete ya!

domingo, 7 de junio de 2009

Los Verdaderos Magos


Muchas veces me han preguntado porque siempre escribo sobre el amor, y más que nada el desamor y la tristeza, creo que esto se debe a la reacción que tienen estos sucesos en mi persona, la tristeza crea en mi el deseo de externar mis sentimientos, de sacar todo lo que me guardo y por lo tanto la forma en que logro hacerlo es escribiendo, muchas veces con los ojos rebozando de lagrimas y un nudo en la garganta, sin embargo creo que es muy importante también saber externar lo que sentimos cuando nos encontramos felices y tenemos momentos que sin duda no cambiaríamos ni por vida eterna. Es por eso que a continuación escribo sobre algo completamente mágico y feliz, así que olvidémonos un poco de la tristeza.


Los Verdaderos Magos


Al caer la noche,

Al despertar por la mañana,

Al terminar la farra

O al ver la sonrisa

De nuestra gente

De nuestra sangre

De nosotros mismos.


Muchos seres divagan por nuestras vidas

Por nuestro tiempo

Por nuestro pasado

Y por nuestro ahora.


Pero son pocos aquellos

Quienes se hospedan

Quienes se quedan

A quienes no sacamos de nosotros

Son pocos aquellos.


Aquellos que beben nuestra alma

Que fuman nuestras tragedias

Y las derrotan

Aquellos que ríen nuestras lágrimas

Y evaporan nuestros miedos.


Pueden ser abundantes o escasos

Pero siempre están ahí

Para abofetearnos en nuestros errores

Para alentarnos en nuestros sueños

O para callar mientras lloramos

Mientras sus hombros

Más sabios que la eternidad

Absorben y borran nuestras agonías.


Son ellos

Ellos que realmente son magos

Tal vez sin saberlo.


Ellos crean maravillas en nosotros

Nos levantan hasta el infinito

Sacan cinco ases de la baraja de nuestra vida

Desaparecen nuestros elefantes temores

Nos hacen levitar sobre nuestros miedos

Y nos hipnotizan para seguir adelante.


Todo esto sin espejos,

Sin asistentes,

Sin cartas bajo la manga,

Sin trucos,

Sin cosas brillantes

Y sobre todo

Sin esperar nada a cambio.


Son ellos

Ellos que realmente son magos

Tal vez sin saberlo.


Son ellos

Quienes en verdad

Hacen magia.


Son ellos

Nuestros amigos

En definitiva

Los verdaderos magos.


Para todos ustedes mis adorados amigos con todo mi cariño, mi amor y mi ser.


Gracias por hacerme quien soy hoy y por dejarme entrar en sus vidas tan trascendente y profundamente.


Los amo.

martes, 28 de abril de 2009

El tercer filo de la navaja que llamamos amor


Antes de comenzar quiero denotar que el amor al que me refiero a continuación es el amor de pareja, no porque sea más importante que el amor a la familia o a los amigos simplemente porque es el que con más frecuencia crea lo que presento a continuación.


Existen momentos tan tristes y dolorosos que arrancan las lágrimas de nuestros ojos y nuestras almas, cuando me encontraba en momentos así siempre me dije a mi mismo: “aprende a disfrutar tu dolor”, siempre he pensado que todo en la vida debe disfrutarse, desde el sentir el contacto del suelo a cada paso que damos hasta la amargura de perder a alguien querido en los brazos de la muerte, muchas veces he escuchado a mí mismo y a la gente que me rodea decir lo absurdo que es el amor y gritar con todas las fuerzas que desearíamos no sentirlo, claro, esto, en momentos de mucho dolor a causa de este, por supuesto, cuando todo es rosa y caminamos entre nubes decimos que es lo mejor que nos pudo haber sucedido.


Cuando comprendí esto descubrí que el amor era una poderosa arma de dos filos, puede llevarte hasta el fin del mundo totalmente hipnotizado y feliz probando cada trozo posible del paraíso sin importarte que sucederá mañana, sabiendo que puedes morir en ese mismo instante y te irías completamente feliz o, puede arrastrarte por entre fuego y filosos cuchillos hasta lo más profundo del infierno, fuego y cuchillos que dejan imborrables cicatrices en el alma.


Pero ahora llega un momento mucho más filosófico en esta reflexión sobre el amor, las previas conclusiones se basan en la presencia del amor pero que sucede cuando este ya se desvaneció, cuando las lagrimas lo disolvieron y fue absorbido por la alfombra de tu habitación o fue evaporado por el calor del ambiente.

Todos sabemos lo doloroso que es el amor cuando comienza a podrirse, cuando las sonrisas, los abrazos y los besos se convierten en mentadas de madre, gritos y saladas lágrimas, creo que todos hemos vivido esto. Y aunque no nos demos cuenta el siguiente momento que pensamos en eso lo hemos superado, el amor que nos daño tanto se ha esfumado y por un tiempo nos sentimos perfectamente felices, hasta que llega el peor de los momentos, el momento en que nos damos cuenta que hemos olvidado lo que es el amor, estamos tan inmersos en fortalecer nuestro amor familiar y de amistad, tan obsesionados con nuestro trabajo y tan centrados en reír todo el tiempo que podamos, que de repente cuando tratas de recordar cómo era estar enamorado no puedes crear el sentimiento por más que te esfuerces, has olvidado el sabor y la humedad de un beso de amor, el calor de un abrazo de la persona que amas o la rápida palpitación que sentías al saber que había algo ahí, que algo se podía dar.


Eso no estoy seguro de que nos suceda a todos, pero definitivamente es lo que me sucede a mí, he descubierto que daría mucho por disfrutar el dolor que me causaba el amor, extraño saber que alguien piensa en mí, extraño pertenecerle a alguien, extraño tener la duda si llamará o no lo hará, extraño besar, abrazar y adorar a alguien de carne y hueso, a alguien con defectos, a alguien como yo.

Por eso descubro que existen fuertes dolores, como extrañar a alguien, dolores que se llorar solo encerrado en una habitación, o que se lloran en brazos de los amigos mientras se bebe para tratar de amortiguar la agonía, pero son más fuertes aquellos dolores que no se pueden llorar, dolores en los que no se siente nada, las lagrimas no brotan y todo lo que hay es un nudo en la garganta que espera ser desanudado por el regreso de esa enfermedad adictiva que llamamos amor.


Ese es el tercer filo del amor, primero cortó para nosotros flores, después cortó nuestras almas creando ríos de lagrimas y ahora corta nuestro llanto y nos aísla de nuestros sentimientos esperando aparecer de nuevo para cortar de nuevo con sus tres amantes, adictivos y misteriosos filos.


Definitivamente extraño el amor.

domingo, 29 de marzo de 2009

Mejor impulsos a flujos


Definitivamente hay veces que por más que gastemos saliva, empeño y fe todo se desvanece en palabrerías y promesas falsas, definitivamente las palabras valen más para algunos de nosotros que para otros, para ellos son solo vanas vibraciones de cuerdas bucales que se pierden en el tiempo y se diluyen en el aire, nosotros depositamos fuertes valores en ellas y creemos que los demás también les dan el valor que ellas merecen, pero no es así, las dicen por decirlas creyendo que al ser palabras dichas valen menos que las escritas o aquellas talladas en piedra.


Sin importar el amor que le podemos llegar a tener a alguien debemos pensar con el cerebro y no con el corazón, definitivamente los fríos impulsos eléctricos son mucho más sabios que los flujos de sangre caliente, y las leyes de Murphy aplican directamente a las relaciones interpersonales, entre más quieras cuidar a alguien más daño buscará esa persona, entre más te desgastes por alguien menos peso tendrán tus consejos en él.


Entonces… ¿Qué será lo que construye a la gente fría y desinteresada? ¿Es acaso la triste decepción?


A quien corresponda

martes, 24 de febrero de 2009

Conocer el amor


Hijo mío, algún día las hojas de los libros caerán como hojas secas y los libros se irán como agua, la imaginación se evaporará y te resguardarás en las fantasías que escribe alguien más para salir de la realidad que atormenta tu vida, las risas se convertirán en lagrimas saladas y entonces, entonces conocerás el amor.


Así dijo mi padre o por lo menos debió decirlo.

jueves, 12 de febrero de 2009

Noche eterna



Esta noche será eterna

Pues mañana vuelvo a tierra

Mañana acerco mi ternura

Y espero embriagarme con tu figura

Soñare que vuelo a ti

Como un ave a una aventura

Revolveré la cama

Y despertaré

Sabiendo que tu lado pronto estaré

Empacaré

Y a un viaje seguro

Mi alma encomendaré

Solo para tener el conjuro

De tus ojos hipnotizándome

Y tus labios otra vez

Resbalando sobre mi piel.

Mirando al mar



Mirando al mar

Pienso en todo lo soñado

Lo vivido y por vivir

Recuerdo todo lo pasado

Contigo a mi lado

Todas las risas y los llantos

Las maravillas y reclamos

Las pasiones y los años

Que a tu lado he añorado

Pienso en todo lo que has dado

Y lo mucho que has tomado

De este ser que ahora sentado

No quiere más que ser amado

Mirando al mar

Me doy cuenta de que le sonrío

Con solo pensar

En cómo me quitas el frio.

Lágrimas de amargura


Duele tanto tener tu aroma

Archivada en mí recuerdo

Y no plasmada en mi piel

Duele verte en papel

Y que mis labios se resequen

Sin la humedad de tu boca y de tu miel

No soporto que mis manos

Reclamen el calor de tu cintura

Y no poder darles más

Que lágrimas de amargura.

Agua Salina


Hoy no existe sabor

Que mi lengua desee

Más que el de tu boca

Mi reloj añora detenerse

Con tu mirada

Mi ropa detesta la soledad

En el piso sin la tuya a su lado

Mi piel se asfixia

Sin tu sudor

Y mis ojos

Emanan agua salina

Al extrañar tu imagen

Frente a la mía

El vacio que ahora

Habita donde estaba

Mi corazón

Sabe que nada lo llenará

Hasta tener tu cabeza

Reposando junto a la mía

Entrelazando las miradas

Y con tus manos

Entre las mias.

La despedida y el amor en tiempos de ausencia



Ayer tus labios con el más dulce

Y a su vez amargo beso

Obligaron a mi corazón

A permanecer contigo

En el adiós las puntas de tus dedos

Tocando las mías cuando me alejaba

Indicaron a mi alma

Que no hay mejor hogar que tu cuerpo

Y tus ojos algo rojos y empañados

Por mi partida me juraron

Que el amor que nos tenemos

No tiene fronteras ni tiempos

No conoce el final

Y no nos dejara jamás

Dejarnos de amar

Mi Lu


mi lubidulia
mi golocidaloveo
mi lu tan luz tan tu que me enlucielabisma
y descentratelura
y venusafrodea
y me nirvana el suyo la crucis los desalmes
con sus melimeleos
sus erpsiquisedas sus decúbitos lianas y dermiferios limbos y gormullos
mi lu
mi luar
mi mito
demonoave dea rosa
mi pez hada
mi luvisita nimia
mi lubísnea
mi lu más lar
más lampo
mi pulpa lu de vértigo de galaxias de semen de misterio
mi lubella lusola
mi total lu plevida
mi toda lu
lumía

Oliverio Girondo

Cuando ya no se puede más



¿Qué sigue después de que el llanto cesa?

¿Ahora que le hago a la tristeza?

Que ya no emana de mis ojos

¿Qué le hago a su recuerdo?

Que vive en mis despojos

Cuando ya no se puede más llorar

El humo de cigarro se lleva mis penas

El aguardiente se bebe la ausencia

Y los amigos…

Los amigos me dan condolencia

Cuando ya no se puede más gritar

La música implora clemencia

El ruido se vuelve creencia

Y su voz resuena en la presencia

De sus fotos añejas.

¿Qué hago cuando el llanto cesa?

Más que buscar

Un abrazo, un beso, un te quiero

En la concurrencia.

Pero estoy aquí




Hoy la ceniza besó de nuevo mi cenicero olvidado
Hoy el humo vuelve a mis pulmones a terminar
Su trabajo de destrucción
Nada queda, nada vivo hay en mí
Más que un sentimiento de agonía, amor y desconocimiento
Del ser que algún día fui
Traté de culpar a alguien que me ama
Y casi la perdí
Trate de llorar mi pena
Y solo vacio brotó de mis ojos
Trate de gritar
Y solo murmullos sin sentido emanaron de mi boca
Pero estoy aquí
Sin saber quien soy
Sin saber que quiero
Sin saber que me da fuerza para seguir
Pero estoy aquí
Porque soy amor, porque siempre lo fui
Pero estoy aquí
Rogando a mí ser
Ser lo que antes fui
¿Qué me mantiene aquí?
Todo el amor que te doy, siempre te daré y siempre te dí
Y siempre estaré aquí para ti